En el duelo de jugadores del Barca, los argentinos le ganaron a los chilenos. Leo Messi, la estrella del conjunto albiceleste, tuvo que mirarlo desde el banco de suplentes.
En el mundo blaugrana, el partido entre Chile y Argentina causaba mucha atención. No sólo porque se enfrentaban algunos futbolistas de la institución, sino también porque aún se encontraba la incógnita sobre la salud de Lío Messi.
El astro finalmente no jugó. El director técnico, Tata Martino, decidió guardarlo y no arriesgarlo, por lo que tuvo un necesario descanso. Los que sí fueron de la partida fueron Javier Mascherano para Argentina y Claudio Bravo por Chile.
El choque fue muy intenso. Se presionó mucho, pero a lo largo de los noventa minutos fueron superior los de celeste y blanco. Con dos maravillas del Fideo Di María, lograron ponerse en ventaja y asegurarse un merecido triunfo.
Con respecto a las actuaciones “culés”, Javier Mascherano fue el de siempre. El cacique en la mitad de la cancha, le ofreció sacrificio y posicionamiento a sus compañeros. A través de su equilibrio, su conjunto creció y fue peligroso en ataque.
Por otra parte, Claudio Bravo fue criticado por el primer gol que recibió su selección. Ángel Di María se metió en el área y remató al primer palo. Al ser un fuerte disparo, las responsabilidades del portero quedaron un poco difusas, pero muchos se animan en decir que tuvo algo más que hacer.
De todas maneras, la victoria de Argentina no se explica en el desempeño del guardameta del Barca. Además, a lo largo del juego se mostró seguro, con mucha tranquilidad para salir jugando con los pies y entregándosela a sus defensores.
Seguramente todos se quedaron con las ganas de ver a Leo Messi. Era interesante ver el encuentro entre la Pulga y Bravo. A su vez, hubiera sido otro partido totalmente distinto, ya que el número diez pone en la mesa lo que nadie puede.