Bravo no la pasa bien

El portero azulgrana Claudio Bravo no está teniendo actuaciones convincentes al cuidado de la meta de la Selección Nacional de Chile, la Copa América Centenario no le está cayendo bien y ha tenido errores poco frecuentes contra Argentina, contra Bolivia y contra Panamá.

¿Qué le pasa a Claudio Bravo?

La noticia para la afición “culé” no es el pase de los chilenos a la siguiente fase de la Copa América Centenario, sino la deficitaria actuación de Claudio Bravo bajo los palos. No parece para los blaugranas tan importante que Chile se haya impuesto a Panamá por 4 a 2, con dos tantos de Alexis Sánchez y dos de Eduardo Vargas; como que el portero Claudio Bravo, se devoró los dos tantos anotados por un precario equipo como el panameño, más voluntarioso que talentoso, lo que levantó las críticas de los aficionados de “La Roja”.

Hay que reconocer que la “hinchada chilena” parece haber olvidado que hace un año atrás, en la Copa América anterior, fue una de las claves determinantes del Chile Campeón.

Desde que empezó esta Copa América Centenario, Claudio Bravo no ha conseguido mostrarse como de costumbre, confiado, seguro, rápido, reactivo, atajador, determinante. Quizá se deba a que no pudo terminar con normalidad la temporada con su equipo y debió llegar sin ritmo futbolístico, lo que en algún punto le está pasando factura al capitán chileno, a quien se lo ve más inseguro y callado que de costumbre.

El primer gol de los panameños lo anotó Camargo, con gran ayuda del guardameta azulgrana, que estuvo muy lento y no pudo detener un tiro desde lejos, que iba dirigido al centro del arco, cuando no habían pasado cinco minutos desde el comienzo del partido. Se lo vio extrañamente falto de rapidez y de reacción que son cualidades marcadas que ha presentado Claudio Andrés Bravo Muñoz en cada partido que disputó para el Barça.

Pero si esto no era más que un simple accidente, más tarde, con la Selección de Chile administrando a voluntad el encuentro, el meta blaugrana volvió a fallar, esta vez más estrepitosamente, tras no detener un tímido golpe de cabeza de Arroyo al centro del cuerpo. Es válido preguntarse qué le pasa y, por sobre todas las cosas, poderlo responder para corregirlo.

Fuente de foto: (AFP) – Clarín