A la espera del mejor

La renuncia de Leo Messi en la selección argentina hace pensar a muchos sobre el efecto que puede llegar a tener en el Barcelona. ¿De qué manera llegará a la próxima temporada? ¿Podrá reponerse después de los malos momentos vividos con la albiceleste?

Lionel Messi siempre es protagonista. Por su habilidad y su talento hace ganar a su equipo y es el centro de la escena. Pero, lamentablemente, en las derrotas también es el más apuntado, sobre todo en Argentina. Los que lo critican se aferran a cualquier aspecto para fortalecer un débil argumento.

Las imágenes de la televisión mostraron un número diez que era pura lágrima. Después de haber errado el penal se lo vio extremadamente tenso. Como sea, necesitaba que la final se la quedara el conjunto del Tata Martino. Sino, sería el más insultado y cuestionado.

El destino dijo que, otra vez, el festejo sólo sea de color rojo. Chile tuvo más tranquilidad a la hora de los doce pasos y se quedó con la Copa América por segunda vez consecutiva. Tras el último penal, el llanto de Leo se volvió desgarrador. Se sentó en el banco de suplentes en soledad, sin tener ganas de hablar con nadie.

No hay que olvidarse que Messi llegó a la competencia luego de una lesión y de un estrés por el enfrentamiento ante la Justicia española. Se sumó a los entrenamientos con sus compañeros con un cuerpo que estaba a punto de decir basta. Necesita descanso, su mente lo pedía a gritos.

Por decisión del entrenador, los primeros encuentros jugó muy poco. Aún así, se las ingenió para ser figura y se lució junto a un equipo que funcionaba de la mejor manera. Seguramente, muy pocos se acordarán de esto, porque en el fútbol el resultado tapa todo tipo de análisis.

Ahora, la mira está puesta en cómo volverá a Barcelona. Indiscutiblemente tendrá que tomarse su tiempo para relajar tanto su organismo como, sobre todo, su cabeza. En el conjunto blaugrana también es una pieza clave, la mayor arma para lograr títulos y darle alegría a la gente.