Gerard Piqué continúa teniendo temporadas excepcionales. Cada vez con más experiencia, le ofrece al equipo mucha seguridad. Luis Enrique sabe que abajo cuenta con un futbolista valioso: El guardián de la defensa.
El guardián de la defensa
Algunos dicen que los equipos se arman de atrás para adelante. Teniendo un buen cerrojo defensivo, se puede pensar en ser efectivo en ataque. En el Barca lo entienden, ya que hace mucho tiempo cuentan con uno de sus referentes.
Gerard Piqué se ha convertido en un ícono. No sólo del Barca, sino también a nivel nacional. Ha jugado mucho tiempo en la selección española y se transformó en una pieza clave. En la última Eurocopa, de los silbidos por cuestiones políticas pasó a la ovación.
La personalidad, el liderazgo, la técnica y el juego aéreo son las características que más se destacan de este fenomenal defensor central. Además, suele tener un rendimiento parejo, algo que escasea en el fútbol actual.
Por otra parte, al ser tan experimentado sirve de mucho para la institución. Dentro del vestuario es una voz más que autorizada para hablar y conducir el grupo. Por su trayectoria, puede dialogar con los más jóvenes y aconsejarlos sobre cualquier temática.
Antes lo tenía a Carles Puyol, más en la actualidad compartió posición con Javier Mascherano. Ahora no se sabe quién tendrá el privilegio de jugar junto a él. Sin embargo, en el club no se alarman porque quien esté tendrá todo el apoyo de Gerard.
Mientras Luis Enrique piensa en los aspectos ofensivos, precisamente en incorporar al tan ansiado cuarto delantero, sabe que media defensa está completa. Eso lo garantiza un hombre de tantas batallas, que conoce el sector de la cancha, la institución y las competencias.
Como todo el grupo, Piqué se sigue entrenando en Inglaterra. Allá, demostrará lo que es capaz de hacer, servirá de ejemplo para los más chicos y se preparará para una temporada que será exigente.