El calendario de La Liga marca que el Barcelona tendrá la difícil tarea de ir a buscar el título fuera del Camp Nou. De los tres partidos que quedan por disputar, dos serán en condición de visitante. En primer término, deberá ir al estadio del Betis, mientras que en la última jornada visitará al Granada en Los Carmenes.
Más allá de que no definir en la casa propia es un hecho que no gusta demasiado, el Barca enfrentará a rivales que dejaron muchos puntos en el camino a lo largo de la temporada, jugando con su público. El equipo que será el rival el próximo fin de semana, Real Betis, sólo ha cosechado 21 puntos de los 51 posibles, mientras que el Granada ha conseguido 20.
De 35 partidos disputados, el conjunto verde y blanco ganó 10, empató 11 y perdió 14. Jugando en el Benito Villamarín no le fue muy bien, ya que sólo festejó en cinco oportunidades.
Por otra parte, el club de Granada, que se encuentra en una lucha plena por salvarse del descenso, se quedó con ocho triunfos, nueve paridades y 18 caídas. En su propio estadio, pudo hacerse de cinco victorias y cinco igualdades.
Si quiere quedarse con el trofeo de La Liga, el conjunto Culé deberá ser fuerte en rodeo ajeno. Sin embargo, además, no podrá descuidar el encuentro y derby que protagonizará con el Espanyol, esta vez en el Camp Nou.
El Espanyol tampoco puede relajarse, porque no está salvado ni con la permanencia asegurada en la Primera División. Se encuentra en la posición número 15, a tan sólo cinco unidades del Sporting, el último equipo que, en este momento, está perdiendo la categoría.
Es sabido que los de Luis Enrique no tienen permitido otro resbalón. Por las caídas y las malas rachas que tuvo este último tiempo, en el tirón final están siendo perseguidos nada más ni nada menos que por el Atlético y el Real Madrid.
A priori, los dos estadios a visitar no parecen ser una fortaleza y es otro factor más para mirar la definición con mayo optimismo. Los hinchas Culé ya se pueden ir soñando con el regreso triunfal a Barcelona.