Barcelona empezó la Liga con victoria con Messi al mando

El argentino se puso el equipo al hombro para vencer al Betis. El Barcelona empezó la Liga con victoria con Messi al mando, solo le faltó el gol.

En su estreno liguero, al Barça le ha costado doblegar el orden táctico del Betis, pero en otro experimento de Valverde ha decidido la intensidad de Deulofeu. El catalán ha desatascado el duelo con sus asistencias en un partido con tres palos de Messi.

Fue 2-0. Goles de Sergi Roberto y Tosca en contra. Primer juego en Camp Nou tras el atentado a las Ramblas.

Las bajas de Luis Suárez y Andrés Iniesta obligaron a improvisar a Ernesto Valverde, que demostró que sigue echando de menos a un futbolista de la talla de Neymar y prefiere continuar haciendo pruebas. Y es que aunque su once titular cuadraba con un sistema 4-3-3, la versión debutante de los azulgrana presentó una 4-2-3-1 muy experimental.

Deulofeu y Alcácer ocuparon las bandas, con mucho movimiento del catalán y el valenciano algo más tirado hacia la punta. Pero la revolución estuvo en el centro, en el que Leo Messi hacía las veces de media punta, en un triangulo con Busquets y Rakitic, pero también de armador, dejando las tareas de presión a un Sergi Roberto que gozó de libertad para moverse a su antojo y tomó la responsabilidad del argentino en la presión.

Gerard Deulofeu fue de lo más destacado en un partido con poco ritmo en el que se notó que la pretemporada aún está muy cercana.

Precisamente el de Riudarenes fue quien desatascó un encuentro de los que se pueden acabar complicando, y es que segundos antes de 2-0 pudo llegar el empate. Combinó Deulo brillantemente con Leo Messi, devolviendo de primeras una pared en la frontal que pareció tocar el argentino pero que acabó rozando Tosca, lo justo para abrir la lata con un gol en propia portería.

Y entonces llegó el susto. Un mal entendimiento en la defensa dejó solo a Sergio León, y cuando armaba la pierna para fusilar a Ter Stegen se lanzó al suelo Mascherano, que tocó lo justo para que el balón le quedara muerto al alemán.

Entre las protestas del delantero, el Barça se lanzó arriba, y de nuevo Deulofeu robó una bola en la línea de fondo para servirla al punto de penalti, donde Sergi Roberto la recogió y picó para engañar a Adán. 

La salsa del enfrentamiento estuvo en la primera mitad, en la que destacaron el centrocampista, el extremo y Leo Messi, que demostró que esta noche su verdadero enemigo eran los postes. Hasta tres veces se topó con la madera el de Rosario, en un duelo que se fue apagando entre los chispazos del ’10’. Una versión a medio gas le vale a los catalanes para empezar con buen pie en LaLiga, pero aún queda mucho trabajo para que el equipo aspire a cotas más altas.