La victoria del Real Madrid ante la Real Sociedad en Anoeta, que le permite seguir en la lucha por el título de la Liga BBVA 2015/2016, no ha estado exenta de polémica por la actitud de los jugadores de la Real Sociedad, entre los cuales había varios ex madridistas. Aparece de nuevo la Operación Maletines y el Barça en la comidilla.
Alborotando el gallinero
En la última jugada del partido de ayer, disputado entre Real Sociedad y Real Madrid, el arquero Rulli, que fue figura durante todo el partido, se arriesgó a entrar al área rival para reforzar el ataque como jugador de campo. La afición madridista no se lo perdona, y se pregunta por qué no se rinden ya que nada se juegan. Entonces las especulaciones sobre los famosos maletines y las primas a terceros hizo que el nombre de Rullí se viralizara en las redes sociales.
Se vive en sospecha, la posibilidad de que los jugadores de la Real Sociedad estuvieran presuntamente primados por el FC Barcelona y o por el Atlético, que son los otros clubes que comparten con el Merengue la lucha por el título, pusieron un manto de duda sobre todas las virtudes legítimas. Seguramente porque es más fácil y más cómodo echar desconfianzas en terceros que girar el eje del análisis hacia propias autocríticas.
Ayer, durante la transmisión televisiva, uno de los comentaristas dijo: “no me parece normal que suba a rematar el portero, la Real no se juega nada y casi no queda tiempo”.
Ayer, durante la transmisión televisiva, uno de los comentaristas dijo: “no me parece normal que suba a rematar el portero, la Real no se juega nada y casi no queda tiempo”. Con lo cual, queda desestimado todo honor, toda gloria, y el amor propio es solo una herramienta de transacción. El arquero argentino, no tiene derecho a mostrar su rebeldía a la derrota si no es por plata.
¿No es legítimo preguntarse si el Barça necesita otro incentivo que no sea el de ganar la Liga más emocionante de los últimos años? ¿Por qué habría de pagar para que los rivales de sus perseguidores ganen, si está claro que con su potencial le basta para salir a ganar en todos lados, como ayer se vio, o como se vio en casi todo el torneo, salvo algunas semanas de turbulencias? Y lo mismo podría decirse con el Atlético. Es que la corrupción, la mordida, la coima, el arreglo, venden más que una victoria deportiva vacía, aburrida, repleta de errores y hasta mal jugada.
No es necesario pecar de ingénuo y creer que el mal no existe. SImplemente, hablar con pruebas y no ensuciar.