La Liga no ha terminado. Luis Enrique y sus jugadores tienen en vista el partido del próximo domingo, que definirá la suerte del conjunto “culé”. Sin embargo, es inevitable pensar en el futuro. Luego de las competencias continentales y los Juegos Olímpicos, comenzará una nueva temporada. Como lo exige la rica historia del club, deberá ser exitosa.
Mientras la dirigencia catalana analiza diferentes posibilidades para incorporaciones, también el ojo está puesto en los que forman parte del grupo. Como Sergi Roberto ya disputó el 60% de los encuentros, su precio aumentó. La cláusula de rescisión subió a 40 millones de euros, lo que lo coloca de otra manera en el mercado de pases.
Esta novedad da cuenta de la clase de jugador que es el canterano. El haber jugado tanto, hizo que su cotización aumentara. Y eso se lo ganó él. Siendo polifuncional, colaborando con el equipo, quizás en posiciones incómodas, ha sido muy importante en el armado del plantel.
Sergi Roberto ha participado en 32 juegos, de titular o desde el banco de suplentes. En todos ha estado presente 45 minutos o más. Disputó 22 en la Liga, cinco en la Copa del Rey, tres en la Champions League, uno en la Supercopa de España y el restante en el Mundial de Clubes.
Si bien su salario es de los más bajos del grupo, el cuerpo técnico tiene plena confianza en sus capacidades. Es más, hace poco tiempo le renovaron el contrato, por lo que su unión con la camiseta azul y roja es hasta el 2019.
Siempre que se lo ha requerido, cumplió. Ha tenido que reemplazar a difíciles figuras como Busquets, Iniesta, Alves y Rakitic. Ha jugado en siete posiciones diferentes y en todas ha rendido. Es cierto que el funcionamiento general lo ayudó, pero no cualquiera logra no desentonar en un plantel de tantas estrellas.
El esfuerzo trae su premio. Muchas veces ha hecho el trabajo que no todos quieren hacer, pero su compromiso le jugó una buena pasada. Por eso, por haber estado en tantos partidos, su precio aumentó y el que quiera sus servicios tendrá que pagarlo más caro.